Una válvula solenoide para agua es un dispositivo que regula el flujo de agua en función de señales eléctricas. Estas válvulas están equipadas con un solenoide, que es una bobina de alambre eléctrico que genera un campo magnético cuando pasa corriente eléctrica a través de ella. Este campo magnético activa un vástago que abre o cierra la válvula, controlando así el paso del agua. Su funcionamiento automático las hace ideales para aplicaciones en las que se requiere un control preciso y sin intervención manual.

    ¿Cómo funciona?

    El funcionamiento de una válvula solenoide es sencillo pero altamente eficaz. Cuando una señal eléctrica se envía al solenoide, se genera un campo magnético que atrae o repele una pieza móvil dentro de la válvula, lo que permite que el agua fluya o se detenga según la necesidad. El control de este flujo de agua puede ser gestionado por sistemas de automatización, como en los sistemas de riego, donde las válvulas solenoides abren o cierran el paso de agua en función de horarios predeterminados o de acuerdo a sensores de humedad.