En los últimos años, la demanda de relés inalámbricos ha aumentado significativamente debido a la expansión de la tecnología de automatización y la adopción de la Internet de las Cosas (IoT). Los relés inalámbricos permiten controlar dispositivos a distancia sin la necesidad de cables, lo que ofrece una mayor flexibilidad y eficiencia. Estos dispositivos son esenciales en aplicaciones que van desde la automatización del hogar, el control de sistemas de iluminación, hasta el monitoreo de máquinas industriales.

    China, con su capacidad de fabricación masiva y su continuo impulso hacia la innovación tecnológica, se ha convertido en uno de los mayores proveedores de relés inalámbricos del mundo. Las fábricas en el país están equipadas con maquinaria avanzada y líneas de producción automatizadas, lo que les permite producir relés inalámbricos a gran escala a precios competitivos.