El relé bistable es un componente eléctrico de gran utilidad en sistemas de automatización y control, utilizado para almacenar y mantener el estado de un circuito sin necesidad de energía constante. Este tipo de relé tiene la capacidad de mantener su posición de forma estable, ya sea en su estado "encendido" o "apagado", hasta que reciba una señal de control para cambiar su estado. A diferencia de los relés tradicionales, que requieren corriente continua para mantener su funcionamiento, el relé bistable ofrece una eficiencia energética superior, lo que lo hace muy atractivo en aplicaciones donde la reducción del consumo de energía es una prioridad.

    Uno de los principales beneficios del relé bistable es su capacidad para ahorrar energía. En un relé tradicional, el consumo de corriente es continuo, ya que se mantiene un flujo eléctrico constante para mantener el relé en su estado activado. En cambio, el relé bistable solo consume energía cuando cambia de estado. Una vez que el relé se activa o desactiva, puede mantener su posición sin necesidad de energía adicional. Este principio es ideal para sistemas en los que es necesario operar durante largos periodos sin intervención, reduciendo el impacto sobre la factura de electricidad.