Un relé es un interruptor electromagnético que, mediante una señal de baja potencia, permite controlar la conexión y desconexión de un circuito eléctrico de alta potencia. Su funcionamiento se basa en la creación de un campo magnético por medio de una corriente eléctrica que activa o desactiva el contacto del relé. Esta capacidad de controlar circuitos sin necesidad de intervenir directamente en ellos ha hecho de los relés componentes esenciales en la automatización y el control de sistemas eléctricos.

    Evolución de la Industria de Relés

    La industria de relés comenzó a desarrollarse a finales del siglo XIX, cuando los avances en electromagnetismo permitieron la creación de los primeros relés eléctricos. En sus primeros años, estos dispositivos se utilizaban principalmente en sistemas telegráficos y de comunicaciones. Sin embargo, con la expansión de la electrificación y la industrialización a principios del siglo XX, los relés empezaron a integrarse en una variedad de aplicaciones industriales.